El tiro penal se creo en el año 1981 con
la finalidad de evitar las situaciones en las que los jugadores impedían un gol más que probable y no recibían más
sanción que la falta. La máxima pena que se aplica en el fútbol. Consiste en
un tiro directo sin barrera, desde una
distancia de 11 metros o 12 yardas siendo la única oposición el portero. Sanción técnica contemplada en la 14va regla.